El Acueducto de la Salud, del siglo XV, se encuentra integrado en la Acequia del Arco o de la Cava, que parte de las proximidades del Casucho, en los confines del límite del término municipal de Olba con Rubielos y San Agustín, y que acaba en el barranco de las Fuentes, junto al barrio de los Ibáñez de Abajo.
Esta conducción de 8 km. de recorrido proporcionaba agua a los principales barrios de la margen izquierda (Los Villanueva, Los Pertegaces, La Tosca, Los Ibáñez Altos) y al propio casco urbano de Olba. Todo su recorrido se realiza por la zona de contacto entre los últimos aterrazamientos agrícolas y la ladera de los montes que definen el curso del río Mijares en este sector.
Un ramal de esta acequia, conocido como la Aceicuca, discurre a una cota inferior y su función es esencialmente agrícola.
El acueducto-acequia está formado por una «calzada» o muro de mampostería adosado al cortado rocoso, con algún pequeño arco para salvar una barranquera o un saliente rocoso. Sobre esta estructura discurría la conducción de agua, que constaba de un sencillo canal descubierto en su parte superior. La estructura de mayor entidad de esta conducción es el Acueducto del Arco o de la Salud, situado en la confluencia del río Rubielos con el Mijares. Constaba de cuatro arcos, de los que solo se conserva uno completo y el arranque de otro, ambos ligeramente apuntados, así como la base de todos los pilares de apeo. El desaparecido arco central debía ser espectacular; sustentado por un esbelto pilar y la pared rocosa, tenía 15,6 m. de anchura y 25 m. de altura. El Arco Nuevo, que sustituyó al Acueducto del Arco tras su destrucción por una riada, fue realizado por José Carmona en 1905.