Ermita gótica del siglo XV, situada en el emplazamiento en el que estuvo la iglesia de la aldea de Pradas, documentada entre 1269 y 1298, que pudo despoblarse tras la fundación de San Agustín. El templo actual se asocia al Castillo de Pradas, residencia señorial de los Sánchez Muñoz, barones de Escriche.
La ermita de Pradas se sitúa al pie del Castillo y muy cerca del emplazamiento de la antigua aldea medieval. Es un templo con fábrica de mampostería y sillares en las esquinas, de planta rectangular y una sola nave. Ésta se divide en cuatro tramos, separados mediante arcos diafragma apuntados, sobre los que se dispone una cubierta de madera a dos aguas. Tiene coro alto a los pies, lugar donde también se ubica la espadaña de un solo cuerpo y que presenta vanos para dos campanas. En la base de este muro de cierre se observa un cambio de fábrica, que podría estar vinculado a una fase más antigua del edificio A la altura del coro se conserva una aspillera.
En cuanto a la portada, se abre por medio de un sencillo arco de medio punto, protegida mediante un pórtico sustentado con columnas octogonales, que, según algunas referencias, pudieran proceder de la antigua iglesia parroquial de San Agustín, demolida en el siglo XVII. Estas columnas tienen capitel y basas decoradas con bolas. Los extremos del pórtico están cerrados mediante sendos muros.
Este templo fue donado en 1865 por el Barón de Escriche al pueblo de San Agustín. Hasta la Guerra Civil albergó la desaparecida imagen de la Virgen de Pradas.