Esculturas góticas de San Valero, obispo de Zaragoza, y San Vicente, diácono, con sus respectivos atributos. Se encuentran incorporadas en la principal fuente del entorno de La Puebla de Valverde, muy cerca del casco urbano y del antiguo Camino Real de Zaragoza a Valencia. Se trata de dos piezas singulares, que podrían datar del siglo XV.
Las esculturas se sitúan en la parte superior del frontal de la fuente, dentro de una hornacina geminada cubierta mediante dos veneras. Están realizadas en piedra local, una calcarenita de grano fino, más dura que la arenisca del resto de la fuente.
La iconografía confirma la identificación de estas figura con San Valero y San Vicente, este último diácono del anterior.
La figura de la izquierda lleva en su mano izquierda una rueda de molino y en la derecha una palma (la palma del martirio) y viste un alba talar, propia de su condición de diácono, atributos que permiten identificarlo con San Vicente. La cabeza barbada del santo ha sido repuesta, lo que explicaría que no fuera un individuo imberbe, como habitualmente es representado.
La otra figura representa a un individuo con capa episcopal y báculo en su mano derecha; al igual que ocurre con San Vicente, la cabeza ha sido repuesta y es de ejecución posterior; representa a un personaje imberbe (la iconografía tradicional desde la Edad Media representa a S. Valero con barba) y aparece tocado con una mitra baja, como es habitual en la representaciones medievales.
Las dos figuras se asientan sobre peanas poligonales molduradas y un dado de piedra que les permite ganar altura.